Los primeros esfuerzos para sustituir al amianto se dieron en la década de los setenta, como consecuencia de la introducción y el ensayo de productos sin amianto comprimido. Muchos de estos productos se han utilizado desde esa época. Sin embargo, existen muchos problemas que justifican una cuidadosa consideración en la elección de un material sustitutivo para el amianto comprimido. La mayoría de los fabricantes de planchas con amianto no utilizan materiales de fibras sintéticas, como la aramida Kevlar®, en conjunción con un elastómero como aglomerante. El aglomerante constituye un porcentaje mayor en este tipo de plancha y, por lo tanto, se convierte en una consideración más a tener en cuenta a la hora de su selección.
Aplicaciones y características: